La alimentación de nuestro perro es una de las primeras decisiones que debemos tomar cuando nuestro perro llega a casa siendo un aspecto básico. Este es un factor determinante para cuidar la salud de nuestro perro, por lo que debemos elegir una alimentación que se adapte a su tamaño y edad.
Debido a sus cuales los perros son uno de los animales más apreciados por las personas. Esto se debe a su lealtad, docilidad, inteligencia y amabilidad tanto con personas adultas, pero sobre todo, con niños dentro de los perros los labradores destacan como una de las razas más populares del mundo.
Es por todos conocidos que los labradores tienden a comer grandes cantidades si se les permite, nuestro deber servir la cantidad necesaria para evitar enfermedades como la obesidad que puede llegar a ser mortal.
Para garantizar la vitalidad y la calidad de vida de nuestro perro debemos proporcionarles un alimento diario con todos los nutrientes que ellos necesitan en función de su edad y tamaño. A continuación, desarrollaremos las peculiaridades de cada uno de los casos en los que nos podemos encontrar.
Alimento para cachorros
Cuando los cachorros nacen deben alimentarse de la leche de su madre durante los primeros 45 días esto les aporta los nutrientes necesarios para ayudar a su crecimiento y desarrollo.
Sin embargo, no siempre es posible, y tenemos que buscar alternativas. En ocasiones, la madre no es capaz de generar la cantidad de alimento suficiente para sus cachorros. En estos casos, debemos recurrir a leches sustitutivas comerciales como complemento del periodo de lactancia.
Una vez finalizado el periodo de lactancia, podemos comenzar a suministrar los conocidos como piensos de iniciación. Recomendamos fijar horarios para las comidas controlando siempre las cantidades bajo. Estas serán planificadas bajo la supervisión de nuestro veterinario con el que fijaremos las pautas a seguir.
Alimentación para un perro adulto
Cuando cumple un año y medio se considera que nuestro labrador ya es adulto. Desde este momento, debemos ajustar el pienso que le damos con sus necesidades, teniendo en cuenta su tamaño, la actividad que realiza, etc.
Aunque las porciones para adultos se suelen dividir en dos tomas diarias, la cantidad exacta dependerá de la actividad de nuestro perro. No es lo mismo que nuestro perro sea tranquilo y pase mucho tiempo durmiendo a que sea activo y gaste mucha energía.
Por este motivo, es recomendable contrastar la tabla de indicaciones del pienso para saber claramente la cantidad y el número de veces que debemos alimentar a nuestro perro. Ante cualquier duda siempre podemos recurrir a nuestro nutricionista veterinario. Siguiendo estos consejos conseguiremos que nuestro perro tenga buena salud y viva muy feliz.